No es un secreto que cuando Gabriel Quadri de la Torre se inscribió al proceso interno de la selección de candidato presidencial del Frente Amplio por México yo fui el primero en criticarlo, ya que era un personaje que en el pasado ha creado polémicas que han manchado su imagen.
Es más en la edición de El Acuario del pasado 10 de julio, titulada “Frente Amplio por México reduce lista de presidenciables” enfaticé que aunque hay 5 que sí deberían pasar, el único que me interesaba que no calificara a la tercera ronda era Gabriel Quadri, porque no beneficiaba en nada a la contienda.
Y hoy, tres días después, vengo a felicitarlo por su decisión de no continuar en la contienda por obtener la candidatura a la presidencia de México por la oposición, y esta vez lejos de mi coraje por lo que dijo hace años contra Oaxaca y Chiapas, explicaré esto de una manera más racional.
La ausencia de Gabriel Quadri en la competencia va a agilizar muchas cosas. Primero, como en esta etapa cada uno de los aspirantes debe conseguir 150 mil firmas, habrá 150 mil ciudadanos que no firmarán con un candidato erróneo por lo que podrán elegir a un mejor perfil al que apoyar.
Al ser del PAN, iba a arrebatarles puntos, pocos pero valiosos, a Creel, Gálvez y a Preciado, algo que le podía abrir paso sin problemas a Mancera, Aureoles y a Paredes, por lo que su presencia no iba a darle los resultados esperados a Acción Nacional.
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Su decisión de permanecer en el Frente Amplio por México y apoyar a la persona elegida, manda un mensaje de unidad, por lo que su “sacrificio” contrarresta la desbandada de priístas de hace días y las críticas realizadas por Lilly Téllez al proceso de selección.
A pesar de que mantengo que el exdirigente del extinto Nueva Alianza no tiene la capacidad para manejar un país, es un hombre inteligente que sabe que palabras utilizar y que va a reforzar a la coalición opositora de cara al 2024.
Otra persona que fue muy inteligente fue el presidente nacional del PAN, Marko Cortés, que supo manejar la decisión tomada por Gabriel Quadri y juntos lejos de generar polémica y divisiones, demostraron por qué esa candidatura se debe quedar en el PAN.
Y a lo mejor pueden comparar y decir que en la Cuarta Transformación nadie ha renunciado desde que se inscribieron, pero recordemos que es un proceso más cerrado, tanto que solo dependerán de las encuestas, ya que ni siquiera habrá debate entre las “corcholatas”.
Mientras que aquí cometieron el error de que se inscribiera “Raymundo y todo el mundo” por lo que no es raro que en este proceso los presidenciables se vayan depurando solitos, cuando se den cuenta que no tienen oportunidad de ganar.
Pero mientras vemos quienes aguantan hasta la tercera ronda en el Frente Amplio por México y quienes preferirán hacerse a un lado, nosotros nos leemos mañana en El Acuario.
