Este viernes la dirigente estatal de Morena, Olga Lucía Romero, minimizó por primera vez el supuesto fraude electoral del que fueron víctimas en 2018. Cuando Miguel Barbosa Huerta perdió frente a Martha Erika Alonso.
Entre otras palabras, dijo que ya no tenía caso hablar del tema ya que había sido un asunto denunciado y juzgado, por lo que toca “ir hacia adelante”.
Sin embargo, ya saben que soy alguien a quien le gusta poner en tela de juicio absolutamente todo y por eso me di a la tarea los posibles escenarios por los que la líder de Morena Puebla dio estas declaraciones:
Escenario 1: Olga Lucía Romero en verdad ve innecesario recordar el supuesto fraude contra Barbosa, tal como AMLO menciona cada que puede la supuesta trampa de la que fue víctima por Felipe Calderón, y entiende que Morena debe preocuparse por armar bien sus perfiles de cara al 2024.
Escenario 2: La dirigente morenista busca minimizar el tema para no darle la importancia que busca Francisco Fraile, un reconocido panista que por no ser lo suficientemente tomado en cuenta decide traicionar a su partido y hacerle ojitos a Morena. Reconozco que la supuesta confirmación hecha por Fraile le quitó misticismo al tema.
Más de El Acuario: ¿PRD fuera del Frente Amplio por México?
Escenario 3: Olga Lucía Romero por primera vez en cinco años se desmarcará del Barbosismo y entiende que los mejores perfiles de Morena a la gubernatura de Puebla y a la alcaldía de la capital poblana no se encuentran en personas que fueron cercanas a Miguel Barbosa. Así que, minimizando el “fraude” le cierra la puerta a ese grupo agonizante.
Independientemente del escenario, opino que la morenista fue inteligente al decidir no hacer leña de ese árbol caído desde hace varios años. Ya que en Morena hay perfiles importantes a nivel estatal que pueden ondear una bandera más interesante que un fraude y detrás de ellos vienen jóvenes con ganas de ciudadanizar de verdad el partido y no solo fingirlo como AMLO y compañía.
De verdad felicito a Olga Romero porque sus declaraciones me hacen pensar que perfiles como Ignacio Mier, Alejandro Armenta y Claudia Rivera no tendrán en contra a su propia dirigencia estatal de cara al proceso interno de la 4T para elegir candidato a gobernador de Puebla.
Por cierto, ¿Cuál de los tres escenarios que dije anteriormente será el correcto? En esto seré imparcial y solo diré que ustedes tienen la última palabra. Mientras tanto, nosotros nos leemos el domingo en El Acuario.
