El Gran Premio de Brasil se vivió de mucho impacto ya que todavía no iniciaba el evento y Charles Leclerc tenía que abandonar la carrera.
Leclerc perdió el sistema hidráulico de su Ferrari, lo que provocó que se fuera directo al muro dejándolo sin posibilidad de correr en interlagos.
Con respecto al mexicano, Checo Pérez logró superar en la primera vuelta a Carlos Sainz para ocupar la séptima plaza, además de tener la suerte que por el accidente de Leclerc, subió un puesto.
En la vuelta 14, Checo Pérez logró pasar a George Russell y se posicionó en el quinto lugar. De esta manera, Sergio fue escalando y el siguiente fue Lewis Hamilton a quien alcanzó cuatro vueltas más tarde.
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Una vez superando a Hamilton, se perfilaba por el tercer lugar y ese lo tenía que pelear con Fernando Alonso, quien mantenía un buen ritmo en la carrera.
La pelea entre ambos fue muy cerrada, la estrategia de Red Bull era rebasar aprovechando los pits mientras que Aston Martin apostó por cambio de llantas.
Fernando Alonso aprovechó su ventaja para regresar a la posición que estaba al rebasar a Checo Pérez. Ambos pilotos estaba a la par y no se veía una diferencia, cualquiera podía ganar.
Alonso iba por delante con una diferencia casi inimaginable. El tapatío aceleró y se puso a la par con Alonso, pero el español por 53 milésimas consiguió quedarse con el tercer puesto y el mexicano conformarse con el cuarto.
A pesar de no subir al podio, Checo Pérez mantiene el segundo puesto mundial con una diferencia ante Hamilton de 32 puntos.
