Vaya mitote el que se armó este miércoles en el Instituto Electoral del Estado (IEE) de Puebla por el ya famoso caso de la presunta transferencia de votos de Morena a Fuerza por México para que salvara su registro en el estado.
Consejeros y representantes de algunos partidos políticos se armaron de dimes y diretes en plena sesión del IEE. de lo rescatable que dijeron los consejeros es que el tema se deberá solucionar en el Tribunal Electoral del Estado de Puebla (TEEP) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
Sin embargo los representantes de los partidos sí dieron opiniones diversas: las más importantes son las que dieron de parte del PAN, Morena y Fuerza por México.
Mientras el del PAN dijo que no permitirán que mantenga su registro un partido por el que la ciudadanía no votó, Morena negó rotundamente lo ocurrido diciendo que es solo una “especulación mediática” y Fuerza por México se limitó a decir que son respetuosos de la ley y las instituciones.
Pero lo que más me llamó la atención es que la presidenta del IEE Puebla, Blanca Yassahara Cruz, durante el ir y venir de lo ocurrido fue prácticamente la única de las personas importantes que se mantuvo en silencio ¿Por qué?
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Podría ser que la dirigente del IEE prefirió no decir palabras para no escandalizar a la prensa y a los partidos políticos. Sin embargo, que la presidenta de un órgano electoral que está siendo acusado de corrupción no diga palabras por lo menos para defenderse nos hace pensar en el dicho “El que calla otorga”.
Eso sí, en el caso Morena-Fuerza por México Puebla aún queda mucha tela que cortar, por lo que es necesario que en algún punto Blanca Yassahara rompa el silencio, y tiene que hacerlo antes que se abra la investigación o ya de perdida antes que dicha investigación concluya.
Ya que, si ella habla tras alguna resolución no tendría caso. Si en la sentencia el IEE es exonerado solo se limitará a decir que sí fueron transparentes, y en caso de ser encontrados culpables de nada servirían sus palabras que probablemente sean excusatorias.
La importante pregunta que hay que responder es: ¿Se abrirá una investigación por esta presunta transición de votos? Sean del bando que sean creo que todos estamos de acuerdo que así debe ser, ya sea para comprobar que sí hubo o que no lo hubo y acabar con esta novela.
Pero mientras vemos como se alarga o llega a su fin el caso de la supuesta transferencia de sufragios entre Morena y Fuerza por México y se comprueba o se descarta la presunta complicidad del IEE, nosotros nos leemos la próxima en El Acuario.