No satanicen las fotomultas de San Andrés Cholula

Hay un fenómeno que durante los 9 años que llevo viviendo en Puebla he observado y no entiendo la razón de ser: el odio hacia las fotomultas.

A los que les he preguntado, vienen con argumentos como: “el dinero se lo queda el gobierno, nomás buscan la manera de amolar”, entre otras cosas, y en esta ocasión las fotomultas que critican son las que recientemente Edmundo Tlatehui Percino, alcalde de San Andrés Cholula, activó con cinemómetros en el Bulevar Los Reyes.

Tengo que ser honesto, las fotomultas no son el enemigo. Los enemigos para automovilistas y peatones son el exceso de velocidad, usar el teléfono celular mientras se maneja y conducir en estado de ebriedad o después de consumir sustancias nocivas.

Criticar un método efectivo para regular la velocidad de los automóviles en San Andrés Cholula, no es más que una campaña netamente política usada contra Edmundo Tlatehui y no precisamente creada por la 4T, pero ese es un tema para otro día.

Más de El Acuario: Equipo de Santiago Creel en Puebla va completo con Xóchitl Gálvez

El consejo que les doy a aquellos quejosos es: si no quieren “regalarle” su dinero al Ayuntamiento sanandreseño, simplemente respeten la velocidad máxima y verán como los cinemómetros del Bulevar Los Reyes no les va a generar ninguna molestia.

Créanme es mejor que interpongan esta herramienta antes de seguir viendo como las laterales de la Vía Atlixcáyotl son usadas para arrancones, que estos sí representan un peligro para la sociedad. Ya que en el menor de los males solo dañan las vialidades pero en el mayor puede arrebatar vidas en pocos minutos.

Y si después que dije todo esto te sigue molestando que Edmundo Tlatehui dijera que si habrá fotomultas en los cinemómetros del Bulevar Los Reyes te invito a hacerte estas preguntas: ¿Me molesta la multa o solo por ser una nueva regla? ¿Andaré tan rápido como para que me moleste la medida?

La respuesta te hará replantear la importancia de las fotomultas, te lo aseguro. Mientras tanto, nosotros nos leemos mañana en El Acuario.