El agente de la Guardia Nacional que fue secuestrado en la Central de Abastos de Puebla fue encontrado sin vida y con múltiples huellas de tortura atrás del panteón de la junta auxiliar de La Resurrección; la bodega donde fue golpeado y quemado con colillas de cigarro quedó asegurada por las autoridades ministeriales.
El oficial ultimado y que junto con dos compañeros realizaba labores de investigación en la Central de Abasto, respondía al nombre de Isauro G.V., con domicilio en el Estado de México, y recientemente había cumplido 40 años de edad.
Isauro tenía el grado de cabo, y este 25 de agosto poco antes de las 8 de la mañana llegó al sitio vestido de civil junto con sus compañeros. Los tres agentes castrenses llevaban a cabo trabajos de inteligencia para la Guardia Nacional.
Se ha precisado que supuestos elementos de Seguridad Privada de la Central de Abasto de la Nave C al detectarlos como sospechosos se acercaron a ellos para retenerlos por lo que empezaron a forcejear.
Dos agentes lograron zafarse y huir, pero Isauro no corrió con la misma suerte pues fue golpeado a puñetazos y patadas para luego ser entregado a un grupo de sujetos que presuntamente forman parte de una banda delictiva que opera en la zona.
Los delincuentes ingresaron al elemento de Guardia Nacional a una bodega de la Nave C, donde lo siguieron golpeando y quemando con las colillas de cigarros en el tórax, abdomen y piernas.
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Después de unos minutos, según las investigaciones de las autoridades, entre cuatro y cinco sujetos se lo llevaron en una camioneta Ford Explorer de color negro sin placas de circulación y la cual incluso fue captada estacionada en el punto por las cámaras de vigilancia de la Central.
Los homicidas se dirigieron junto con su víctima hacia la Vía Corta a Santa Ana y posteriormente hacia la autopista México-Puebla, según la revisión de distintas cámaras de diversas vialidades.
Tras una búsqueda intensa en la zona y diversos puntos de la ciudad, así como la revisión de bodegas de la Central de Abasto, policías municipales de Puebla que llevaban a cabo un recorrido, lograron ubicar en la calle Benito Juárez, a respaldo del panteón de La Resurrección un cuerpo con características de Isauro.
A las 17:00 horas, tras el hallazgo, los policías dieron parte a la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) de tal manera que peritos, agentes ministeriales de la Unidad de Delitos Cometidos Contra la Vida y la Integridad Corporal, policías estatales, elementos del Ejército Mexicano y de la Guardia Nacional se desplazaron a la zona.
Ahí entre la maleza confirmaron la presencia del cuerpo de Isauro, quien incluso tenía el rostro golpeado y diversas huellas de tortura, pero, además, estaba semidesnudo y atado de las manos.
Después de que fuera reconocido por sus compañeros, los agentes ministeriales procedieron a las diligencias del levantamiento del cuerpo además de que dieron inicio a la carpeta de investigación FGEP/CDI/FIM/HOMICIDIOS-I/016485/2023.