El probable delincuente que se encuentra sujeto a indagatoria por parte de la Fiscalía General del Estado, Juan Lira Maldonado se quedó solo en su alegato para quedarse como presidente municipal de Chignahuapan, luego de la determinación de un tribunal por invalidar el proceso comicial del 2 de junio.
No lo dicen sus adversarios, ni los medios de comunicación y mucho menos los funcionarios de los distintos niveles de gobierno que conocen de cerca el caso y en quienes existe la convicción de que un personaje de la calaña de Lira Maldonado está impedido legal y moralmente para conducir un gobierno en ninguno de los municipios de México.
En realidad la postura la dijo el partido que le dio cobijo como candidato a la elección constitucional que terminó en el primer domingo de junio: Fuerza por México a través de comunicado de prensa que contrasta notoriamente con la que ha decidido emprender el ex candidato a la alcaldía.
“En el Partido Fuerza por México Puebla, somos respetuosos de las autoridades electorales y sus determinaciones, las emitidas por el Instituto Estatal Electoral, el Tribunal Electoral del Estado, así como de las Salas del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, en cada una de sus competencias son acatadas”.
Aunque tardía, la postura del partido político en el aún figura como presidente nacional el difunto Gerardo Islas Maldonado, no deja lugar a dudas en el afán de deslindarse de un personaje que aún mantiene tomado el palacio municipal para forzar una negociación con el gobierno del estado.
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“Aún analizamos si participaremos de forma individual o en coalición” en las elecciones extraordinarias previstas para el primer trimestre de 2025 en los municipios de Chignahuapan, Venustiano Carranza, Xiutetelco y Ayotoxco de Guerrero, dice el texto la franquicia electoral en lo que debe entenderse como el cambio de página luego de lo sucedido en la elección y la crisis derivada del proceso que resultó en un cúmulo de irregularidades.
No se debe tener en el olvido que Chignahuapan y Venustiano Carranza, especialmente, fueron los dos municipios que pusieron a prueba las instituciones luego de que el Tribunal Electoral en el Estado determinó reconocer los triunfos de los respectivos candidatos: Juan Lira en el primer caso y Marco Valencia, en el segundo, que compitió por la alianza opositora integrada por el PAN-PRI-PRD.
Solo el ex candidato de Fuerza por México se ha mantenido en una pelea por el cargo que dista enormidades de las legítimas causas políticas que buscan ofrecer mejores condiciones de vida para los habitantes de aquel lugar, en donde ha dominado en los últimos meses grupos de delincuencia.
Lira Maldonado carece de base social, pero una amplia red de complicidades e intereses. Fuerza por México, convertido en una entelequia en el sistema de partidos hace un esfuerzo infructuoso por librar la responsabilidad que en efecto tiene al fichar a probable infractor de la ley.
“… en Fuerza por México Puebla somos respetuosos de la libertad de expresión de cada ciudadana y ciudadano, por lo que los puntos de vista o manifestaciones de quienes fueron nuestros candidatos o candidatas, en contra o a favor de las resoluciones de las autoridades electorales, son a título personal y no expresan la forma de pensar del instituto político”.
Mas legítimo y de mayor valor habría sido expresar con contundencia: Fuerza por México se deslinda de las acciones que ha emprendido el ex candidato Juan Lira Maldonado por improcedentes e ilegales. ¿Era eso tan difícil?
